miércoles, 19 de marzo de 2008

Llamado a la solidaridad

La situación de precalentamiento en una clase nueva de teatro es de lo más cómica. En realidad, en todo el año está esa cuestión de vergüencita de grupo humano haciendo pavadas a la vez, pero que más entrado el año se va salvando, porque ya cada uno va tomando un rol en el grupo, ya no se mide todo, ya todos sabemos que no hay peligro.

Ayer, en cambio, mientras que en el pecho sentía los mismos nervios del primer día de clases de segundo grado (muchos, porque encima me había cambiado de colegio), para afuera me hacía la que relajaba el cuello, la mandíbula, la espalda, las muñecas. Sacaba la voz un poco -no mucho- y pensaba "Mirá ese cómo se tiró en el piso para estirar, qué se hace?" o "Ella seguro que es buenísima" o "Mejor me pongo acá atrás así nadie me ve" o "Por qué me traje esta remera que está toda gastada" o "Por qué no me tranquilizo un poco y dejo de transpirar".
A mi derecha encontré las caras amigas del año pasado, que entre mi sonrisa tironeada supieron leer "mejor nos vamos a tomar una cerveza al bar de la esquina", y eso de que me comprendieran me hizo respirar mejor, que estábamos en la misma. Y en ellos podía descansar mi seguridad, lástima que despertaba de aquel modo.
¿Cuánto más tiempo nos van a dar para seguir haciendo el ridículo entre todos nosotros? Porque disimulando mi poca elongación no creo que me haga amiguitos nuevos este año! Y si hay quien realmente haya estado usando todo esto para lo que debería?!! A favor del actor?! De ese desconfío aún más... Podemos empezar, por favor...? Por favor, que arranque la clase, que entremos en ese terreno donde puedo crear la realidad que se me canta, por favor, por favor!

Y... empezó.


2 comentarios:

  1. en la foto, además de la cara de toor, paul era el único descamisado. sin dudas, atravezaba una fase de retorno al utero materno.

    las definiciones de tu apellido son lo más


    (y gusta mejor de male en peor)

    ResponderBorrar
  2. jajajajajajaja
    ay male!! tal cual... por que uno desencadena el prejuicio maldito ya en el primer segundo en el que la rubia linda hace esas posiciones de yoga que es obvio que a nosotras no nos sale?? el prejuicio se desata temprano, en ese terreno tan lamentable como el calentamiento.


    mi secreto es, que a veces llego tarde para perdermelo. me hago creer que no lo necesito, aunque a veces me quede dura mirando a la izquierda.

    ResponderBorrar

 
Creative Commons License
Esta obra está licenciada bajo una Licencia Creative Commons.